Rudbornn Chelute (ルドボーン, , Rudobōn Shelute?) es un Arrancar que ostentaba el cargo de líder de los Exequias (葬討部隊 （エクセキアス）, , Ekusekiasu?, literalmente "Escuadrón Funerario"), la división ejecutora del ejército de Sōsuke Aizen. Era el 61º Arrancar.
Tanto el líder de los Exequias como todos los soldados Arrancar pertenecientes a su escuadrón viste un uniforme que no deja ni una sola parte de su cuerpo visible. En el caso en concreto de Rudbornn, su rostro está cubierto por una calavera similar a la de un toro, con dos grandes cuernos saliendo a ambos lados de su cabeza y confiriéndole un aspecto ciertamente tétrico. Precisamente, es esta máscara el único elemento que permite distinguir a Rudbornn del resto de los Exequias, ya que ellos utilizan la misma indumentaria pero sus cabezas se hayan cubiertas por una cráneo humano, en lugar de bovino. El traje de los Exequias es el estándar de todos los Arrancar, y consiste en una chaqueta y un hakama de color blaco, ceñidos a la cintura por medio de un cinturón sash negro, del mismo color que el calzado y unos guantes especiales. A fin de ocultar hasta el último milímetro de su cuerpo, las chaquetas de Rudbornn y los otros Exequias son de cuello alto, mientras que los guantes parecen estar cosidos a las mangas. La única diferencia, aparentemente, entre el traje de Rudbornn y de el resto de los Exequias, aparte del cráneo que cubre sus rostros, son las franjas negras que Rudbornn posee en su traje a la altura de los antebrazos.
Personalidad
A lo largo de las distintas apariciones que ha protagonizado, Rudbornn ha demostrado ser un Arrancar bastante frío y racional, que no se deja llevar en ningún momento por sus impulsos y obedece sin cuestionarse siquiera las órdenes que ha recibido. Al contrario que otros Arrancar, Rudbornn no es pendenciero ni busca enfrentamientos que ya están perdidos de antemano, siendo consciente en todo momento de sus propias limitaciones y actuando en consecuencia. Así, mientras que la inmensa mayoría de los Arrancar considera inferiores a todos los Shinigamis y el simple hecho de subestimarlos juega una importante parte en su derrota, Rudbornn asume el hecho de que no es rival para un Capitán y de que su poder está lejos de rivalizar con el de los Espada. Con los personajes con los que ha llegado a interactuar se ha mostrado siempre bastante respetuoso, llegando a añadir a todos los Arrancar a los que se ha referido el sufijo honorífico -sama independientemente de su rango.
Relaciones
Aunque las intervenciones de Rudbornn han sido bastante breves y muy limitadas, curiosamente ha llegado a coincidir con la mayoría de los personajes protagonistas de la llamada Saga del Hueco Mundo en muy distintas circunstancias. Siguiendo las órdenes de recolección de datos acerca de los intrusos detec
Los Exequias junto a Rudbornn
tados en el palacio de Las Noches y de asesinar a todos los supervivientes de las distintas luchas ocurridas, llegó a toparse hasta en dos ocasiones con Ichigo Kurosaki. Tratando de cumplir la misión que se le había asignado, de forma maquinal y desapasionada, Rudbornn llegó incluso a cruzar su Zanpaku-tō con la de Ichigo en la segunda ocasión, pero no llegó a existir una verdadera pelea entre ambos, ya que fue rápidamente interrumpido. Además, el carácter frío y poco interesado de Rudbornn evitó que surgiese rivalidad alguna con Ichigo. Tampoco podría hablarse de un antagonismo entre Rudbornn y Rukia Kuchiki, si bien es cierto que en este caso el líder de los Exequias infravaloró a su oponente, seguro de su superioridad sobre una Shinigami que era miembro raso de una división, algo que acabaría pagando caro.
Pese a que no han llegado a coincidir en la historia, Rudbornn parece guardar una alta estima por Aizen, llegando a decir que los poderes especiales de su resurrección fueron un don personal del líder el ejército Arrancar. Tampoco se ha llegado a ver en ningún momento juntos al líder de los Exequias y al Espada que el encargó su tarea de toma de datos y ejecución tanto de los intrusos como de los Arrancar derrotados, Szayelaporro Granz. Por el contrario, sí se vio que pese a su misión, Rudbornn trató con bastante respeto a los Privaron Espada que se habían convertido en objetivos prioritarios.
Sinopsis
Saga del Hueco Mundo
Sin pedirle permiso previo a Aizen, la Octava Espada, Szayel Aporro Granz, envía al escuadrón ejecutor de los Exequias tras la pista del grupo de intrusos que ha accedido al palacio de Las Noches con el o
Rudbornn y los Exequias
bjetivo de rescatar a Orihime Inoue. Siguiendo la pista a Ichigo, Rudbornn y los demás Exequias hacen su primera aparición al poco de haber finalizado éste su combate con el Privaron Espada Dordoni Alessandro Del Socaccio. Éste último, que se sentía en deuda con Ichigo por haberle mostrado todo su poder durante unos breves instantes, se ocupa de retener durante unos momentos a los Exequias mientras el Shinigami sustituto huye sin percatarse del peligro. No obstante, Dordonii ya se encontraba herido y Rudbornn no parece tener grandes complicaciones a la hora de acabar con él, pues no tarda en reaparecer totalmente ileso y continuando la misión que le ha sido asignada.
El siguiente objetivo de los Exequias es la también Privaron Espada Cirucci Sanderwicci, quien había sido vencida por Uryū Ishida. Sin encontrar oposición alguna en Cirucci, Rudbornn presuntamente acaba con ella.
Los Exequias se encuentran con Unohana e Isane
Tras ello, Szayelaporro llegará a luchar con Ishida, y según le diría entonces, ya había tenido tiempo suficiente para analizar su poder espiritual y conocer todas las técnicas y armas que había llegado a utilizar contra Cirucci, lo que significa que la labor de los Exequias había dado sus frutos. Éstos tardarán algo más en llegar al lugar donde yacen sin conocimiento tanto Yasutora Sado como Gantenbainne Mosqueda, pero antes de que Rudbornn descargase sobre ellos el golpe definitivo, es interceptado por Yachiru Unohana, Capitana de la 4ª División del Gotei 13, y por su Subcapitana, Isane Kotetsu. Sorprendido de tener ante sí a un adversario tan peligroso, que además manifiesta sus deseos de curar a los heridos y de no luchar a no ser que se vea obligada a ello, Rudbornn decide sabiamente retirarse junto al resto de su escuadrón.
Saga de la Batalla de Karakura
Rudbornn atacando a Ichigo
Cuando Ichigo se dirige a la torre donde Orihime se encuentra retenida por Ulquiorra, Rudbornn y los Exequias se interponen en su camino tratando de ofrecer resistencia, mas los amigos del Shinigami sustituto los atacan y distraen su atención. Rudbornn ordena a sus subordinados que no se dejen engañar y acude en persona a luchar con Ichigo, aunque no puede hacer gran cosa al ser parcialmente congelado por Rukia Kuchiki, quien así permite que su amigo pueda acudir en rescate de Orihime. El líder de los Exequias se deshace del hielo con facilidad y manda a los supervivientes de su escuadrón a enfrentarse a la Shinigami, pero éstos son rápidamente derrotados. Ante esta situación, Rudbornn en persona decide encargarse de Rukia, diciéndole que derrotando a sus subordinados no alcanzará la victoria, e inmediatamente después libera su Zanpaku-tō.
Rudbornn siendo congelado por Rukia
A la vez que Ichigo se está enfrentado a Ulquiorra, Rukia prosigue su batalla contra Rudbornn, quien no duda en revelarle la habilidad especial de su Zanpaku-tō. Seguidamente, el líder de los Exequias se lamenta de que pese a su prodigioso poder él no pueda aproximarse al nivel de lucha de los Espada aunque ni Rukia ni sus aliados puedan llegar a ser jamás rivales dignos de él, sino tan sólo "pájaros contra un escudo". Cuando Ulquiorra sale de Las Noches a través del domo, Rudbornn detiene momentáneamente su lucha, sorprendido ante este hecho, momento que es aprovechado por Rukia para seguir congelando las "ramas" de su adversario diciéndole que ha sido un error haberle mostrado la naturaleza de sus poderes. Algo después, se ve que Rukia ha sido capaz de adquirir una clara ventaja sobre Rudbornn y que éste parece encontrarse próximo a la derrota, si bien su enfrentamiento se ve interrumpido por un enfurecido Yammy Llargo, quien arremete contra el líder de los Exequias sin mediar palabra y le rompe parte de su máscara. El paradero de Rudbornn a partir de este momento se desconoce.
Según sus propias palabras, por terribles que pudieran llegar a ser sus poderes, no son comparables a los de los Espada, razón por la cual seguramente evitó un enfrentamiento con Unohana nada más saber su identidad. Si bien la posición dentro de la jerarquía en el ejército Arrancar de Rudbornn y los Exequias no está muy clara, probablemente sea considerado similar a los Números, aquellos Arrancar especializados en el combate que no han pasado a formar parte del servicio personal de un Espada en concreto.
Si bien es cierto que apenas hemos visto luchar a Rudbornn, su estilo de combate parece estar basado en el uso de la Zanpaku-tō, al arremeter con ella directa y limpiamente hacia sus oponentes. No ha llegado a realizar ninguna de las habilidades propias de los Arrancar a excepción del Sonido, con el que cual puede moverse a una velocidad tan alta que sólo los ojos más avezados son capaces de seguir sus movimientos, aunque probablemente sí conozca otras igual de generales.
Zanpaku-tō
Árbolada (髑髏樹 (アルボラ), , Aruborada?, lit. "Árbol de los Cráneos"). En su estado sellado tiene la forma de una katana algo más estilizada de lo normal. Su guardia tiene la forma de un rectángulo de vértices suavizados, sin ornamento alguno y más alargado que el existente en otras Zanpaku-tō. La funda sobre la que reposa Árbolada también es de color blanco, dando una mayor sobriedad al aspecto global de Rudbornn, todo en blanco y en negro.
Árbolada
Resurrección: la liberación de Árbolada se produce mediante el comando de activación Crece (生い上れ, , Oiagare?), ante el cual Rudbornn comienza a desplegar un poder espiritual de color violeta oscuro a la vez que comienza su transformación alzándose del suelo. En su estado liberado, el tórax y los brazos de Rudbornn se ven envueltos y firmemente sujetas por ramas, que se separan del cuerpo a la altura de las caderas formando raíces que mantienen al líder de los Exequias a cierta altura sobre el suelo. A su espalda surgen hasta diez ramas con forma de rayo de las que cuelgan a modo de macabros frutos unos cráneos humanos similares a los que tienen sus subordinados.
En su brazo derecho Rudbornn esgrime una vara también con la forma de un rayo, que probablemente utilice como arma. De hecho, Rudbornn es uno de los contados casos de un Arrancar que porta un arma en su estado liberado, siendo junto con Mila Rose el único que mantiene esta particularidad sin llegar a ser uno de los Espada. Además, su resurrección tiene la siguiente habilidad especial:
Habilidad Especial de Arbolada
Calaveras (髑髏兵団 (カラベラス), , Karaberasu?, lit. "Soldados Esqueleto"). A partir de los cráneos humanos que cuelgan de sus ramas, Rudbornn es capaz de crear ilimitados soldados Exequias a gran velocidad y que se encargan de combatir y fatigar al adversario sin necesidad de que el líder y auténtico creador de todo el escuadrón de los Exequias tenga que pelear personalmente. Rudbornn afirma que esta habilidad es "divina" y que le fue dada por Aizen en persona, seguramente refiriéndose con este hecho a su conversión de Hollow a Arrancar. No obstante, y como no tardaría en descubrir Rukia, al congelar los cráneos antes de darles tiempo a madurar y crear más soldados, conseguía neutralizar por completo este poder especial.
